Las infecciones asociadas a la atención en salud constituyen un problema de salud pública, ya que se asocian a un aumento de las tasas de morbimortalidad y a un incremento en los costos en salud. De ahí la importancia de que los profesionales de la salud, que están en la atención directa, manejen conceptos sobre mecanismos de producción de infecciones y sus medidas de prevención, para así garantizar la calidad de la atención del servicio. Las Infecciones Asociadas a la Atención en Salud (I.A.A.S.), han tenido distintas definiciones. Anteriormente eran conocidas como “Infecciones Intrahospitalarias” (IIH). En la actualidad también se incluyen infecciones que se generan en la relación de las personas con la atención en salud, sea ésta en hospitales o durante atenciones ambulatorias. Se considera infección a la reacción adversa localizada o generalizada producida por microorganismos o sus toxinas. Se entiende como Infección Asociada a la Atención en Salud aquella que se contrae después de 48 horas de hospitalización y en el cual los signos y síntomas no estaban presentes o en incubación en el momento del ingreso (hospitalización) del paciente. Con el fin de extender los avances alcanzados, mediante la entrega de orientaciones prácticas para el personal de salud, a continuación analizaremos las principales vías de transmisión de IAAS y algunas de las estrategias para prevenirlas y controlarlas.